Según un artículo de FastCompany, este método funciona a la perfección si la empresa está reclutando actores con buena memoria para los guiones. Sin embargo, puede ser tremendamente engañoso para evaluar el grado de capacitación del entrevistado para el puesto. Veamos algunos consejos para una entrevista efectiva…
1) La trampa de la linealidad
Una entrevista laboral tradicional es una especie de recorrido lineal por el CV del candidato. El entrevistador lee el CV y va formulando algunas preguntas prefabricadas para completar la información, preguntas para las que el candidato seguramente ya sabe las respuestas.
Según el artículo de FastCompany, una técnica más efectiva consiste en orientar toda la entrevista en torno a una o dos temáticas centrales. En lugar de formular preguntas superficiales sobre muchos temas, aproveche los pocos minutos de la entrevista para profundizar, por ejemplo, en algún proyecto donde haya participado el candidato: «¿Cómo cree que fue su desempeño en esta tarea? ¿Por qué cree que no pudo cumplir el objetivo? ¿Por qué decidió abandonar el proyecto? Si pudiera empezar de nuevo, ¿qué cosas haría distinto?»
2) Preguntas fuera de libreto
Si usted le pregunta al entrevistado cuál es es su principal debilidad, en nueve de cada diez casos seguramente reciba una respuesta del estilo: «A veces, soy demasiado perfeccionista porque me entrego por completo a empresa». Son los consejos de «cómo tener éxito en una entrevista laboral» en acción.
Ahora bien, ¿por qué no le pregunta cuál es su segunda debilidad? Descolocado, el candidato seguramente le brinde una respuesta mucho más sincera.
Si lo importante es «evaluar el grado de capacitación del entrevistado para el puesto» (cita textual), el problema es que la entrevista la lleva a cabo una persona que ignora por completo todo lo referido al puesto. La mejor entrevista de evaluación (la única válida) es una realizada por tu futuro jefe, no por un externo de RRHH…..